Disimulad un poco, carajo. Que no se os note tanto el plan en el que habéis llegado a los informativos. Cortaos un pelín. ¿Qué necesidad hay de contratar como tertuliana de “Los desayunos de TVE” a la mismísima esposa del ministro de Cultura? Hombre, no me jodáis. Es un cantazo. Pero si podríais poner a decenas de contertulios que cumplirían la misma función. No me creo que sea por dinero. Es sencillamente porque estáis cegados por un subidón de matonismo desenfrenado. Manipulad la información, yo no digo que no, pero que se os note que no queréis que se os note. Que lo contrario es muy ofensivo para el espectador.
No niego la valía de Edurne Uriartecomo comentarista político. Nadie negará tampoco el magisterio de Iñaki Gabilondo en el campo del periodismo pero a nadie se le pasó jamás por la cabeza contratarlo como tertuliano de TVE mientras su hermano Ángel fue ministro. Carajo, pues igual aquí. Bajad un poquito los humos. La afirmación de que la mujer del César no sólo ha de ser honesta sino parecerlo se formuló hace muchos siglos. De haber vivido Julio Césaren la actualidad, el aforismo diría “la mujer del César no sólo ha de ser honesta y parecerlo, sino que tampoco ha de participar en debates televisivos en donde se juzgue el trabajo de su marido”. De cajón.
Pero nada. Pasan las décadas y no hay forma de que cambiéis. Colocáis a Uriarte de tertuliana dos días después de infravalorar la Diada dos días después de cepillaros a los contertulios Maraña, Losada y Berlín. ¿Qué haréis pasado mañana? Y, de verdad, esa chulería con la que ponéis los cojones encima de la mesa, ese descaro en la parcialidad, ese importaros una mierda que se note que os sentís dirigiendo vuestra propia empresa privada, es una falta casi tan grande como la propia manipulación y hace que los informativos en la televisión pública tengan un pésimo pronóstico. Reíos de mí, bueno, pero por lo bajo, no a carcajadas. Manipulad, vale, pero como se manipula en los regímenes democráticos, no como se manipula en las dictaduras. Disimulad un poco, hostia, que no os cuesta nada y el resultado es prácticamente el mismo.
Vídeos que voy encontrando:
Que poca verguenza, despiden a periodistas de la talla de Juan R. Lucas, Xavier Fortes, Ana Pastor, etc, para poner a la mujer del ministro, fichar a Bertín Osborne y convertir la televisión pública, la que pagamos todos, en una casa de citas.El próximo Lorenzo Milá corrersponsal en N.Y.Vivimos en un sistema democrático y suficientemente desarrollado, como para poner fín a la tradición de que cada vez que cambie el gobierno, la radio y la televisión pública , tambien esté cambiando.Se confirman los peores temores que predicen una toma de control político en RTVE.
ResponderEliminarQue vergüenza... siempre lo mismo...
ResponderEliminar