No es fácil en estos tiempos ser mujer de un marinero ni madre ni tan siquiera hija, estas mujeres curtidas por la soledad saben que su vida no es un camino de rosas, por eso su mayor virtud es la firmeza y la espera. Hoy día tan de actualidad el caso de los tripulantes secuestrados por piratas en el Indico han demostrado una vez más el tesón y la fuerza de todas esas mujeres que llevan días y días con la incertidumbre de saber que pasa con sus hombres, pero sin desfallecer ni un solo momento.
Las familias de los marineros es matriarcal y aunque para la mujer no sea negativo termina siendo una carga terrible, porque mientras ellos estan navegando, ellas se convierten al mismo tiempo en madres y padres y en muchos momentos han de tomar decisiones importantes echando en falta la presencia del hombre en esos instantes.Esto solo pretende ser un pequeño homenaje desde este blog a esas pacientes mujeres que esperan poder abrazar pronto a sus seres queridos.
Las familias de los marineros es matriarcal y aunque para la mujer no sea negativo termina siendo una carga terrible, porque mientras ellos estan navegando, ellas se convierten al mismo tiempo en madres y padres y en muchos momentos han de tomar decisiones importantes echando en falta la presencia del hombre en esos instantes.Esto solo pretende ser un pequeño homenaje desde este blog a esas pacientes mujeres que esperan poder abrazar pronto a sus seres queridos.
Son situaciones muy complejas, pero ellas y sus familiares son las que mas Sufren...Pero me viene a la cabeza uno de los principios que hay en la Democracia Occidental.
ResponderEliminarNo se negocia con Terrorista ah, pero a estos se les llama Piratas
Negociar SIEMPRE, sucumbir al chantaje NUNCA, cauces legales para soluccionar el conflicto? por supuesto, a ver si tenemos un poquito de cautela y prudencia que está en juego la vida de 36 personas.
ResponderEliminarNegociar con Terroristas Nunca, aunque puede haber excepciones, prudencia, no seguridad, eso es lo que llevan años pidiendo los marineros.
ResponderEliminarPa tí la peseta, menos mal que no estamos en tus manos o esos pobres marineros ya estarían muertos. en fin
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